El pleno del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria rechazó anoche miércoles, con la mayoría absoluta del Partido Popular, una moción del PSPV en la que se facultaba al alcalde, Francisco Tarazona, a iniciar las conversaciones para la compra de las instalaciones de la cooperativa agrícola San Antonio que cerrará próximamente sus puertas tras un expediente de regulación de empleo (ERE) de los 46 empleados.
El portavoz socialista de Riba-roja, Robert Raga, vaticina que el rechazo del PP a apoyar la moción del PSPV “abre la puerta a la incertidumbre del futuro de una cooperativa que ha sido siempre un referente para Riba-roja y que ahora este equipo de gobierno abandona por completo con la posibilidad de que, finalmente, caiga en manos de especuladores a un bajo precio”. La propuesta socialista incluía la solicitud de un informe previo de los técnicos municipales sobre la viabilidad de compra de las instalaciones de la cooperativa por parte del ayuntamiento.
La Cooperativa se halla actualmente inmersa en un concurso de acreedores que concluirá en breve con la venta de todas las instalaciones que posee en la localidad. Entre ellas, una nave de 6.000 metros cuadrados de extensión, una gasolinera y un edificio en el casco urbano de otros 500 metros.
El portavoz socialista de Riba-roja ha explicado que unos primeros cálculos económicos del PSPV establecen en 60.000 euros anuales el coste que para el ayuntamiento tendría la compra de las instalaciones de la cooperativa “perfectamente asumibles para las arcas municipales mediante el recorte de los gastos correspondientes a las fiestas, fastos y despilfarro del Partido Popular”.
Raga ha manifestado que la implicación del ayuntamiento en el proceso de la Cooperativa “protegería los intereses de los socios, de los cooperativistas y de los empleados afectados que tendrían un futuro digno en un momento económico de graves dificultades para muchas familias, ya que a través de la agricultura ecológica y de la tradicional sería plenamente factible un resurgimiento de esta actividad tan arraigada en Riba-roja después de más de 60 años de historia de la cooperativa”.